La enorme cantidad de plásticos que usa la humanidad se ha convertido en un problema medioambiental de primer orden. Afortunadamente, están apareciendo en el mercado envases sostenibles que son más respetuosos con el medio ambiente, principalmente por su facilidad de reciclado o porque no están fabricados con la materia prima que más contamina: el petróleo.
En este blog te vamos a explicar las diferencias de sus principales atributos. ¿Qué diferencias hay entre biodegradable, reciclable y compostable?
Envases reciclables
El reciclado es toda operación de valorización mediante la cual los materiales de residuos son transformados de nuevo, por la acción del hombre, en productos, materiales o sustancias, tanto si es con la finalidad original como con cualquier otra finalidad. El reciclado debe ser realizado por empresas (recuperadores y recicladores) oficialmente registradas.
Por lo tanto, un Material Reciclable es todo aquel que se pueda convertir, tras su uso, en otro material o producto por acción del hombre en plantas especializadas, cuando existe la tecnología, a nivel industrial, para llevar a cabo ese proceso de forma viable ambiental y económicamente.
Envases biodegradables
Un material se considera biodegradable cuando se puede descomponer en biomasa y nutrientes por acción de procesos físico-químicos naturales o por la acción de agentes biológicos. En este proceso no interviene la acción del ser humano (son procesos de descomposición natural en el medio ambiente). Aplicado al depósito en vertedero, se consideran biodegradables todos los residuos que, en condiciones de vertido, pueden descomponerse de forma aerobia o anaerobia.
La biodegradación está fuertemente influenciada por la naturaleza química de la sustancia o material que se pretende biodegradar (materia orgánica, papel, cartón, madera, etc.) y el ambiente de biodegradación. Este proceso debe producirse en un periodo de tiempo “corto a escala humana”.
Envases compostables
Un material se considera compostable cuando, tras su utilización, puede degradarse en un proceso controlado, termófilo y aeróbico, que degrada la materia orgánica y la transforma en un material homogéneo y estabilizado, rico en compuestos húmicos y utilizable como fertilizante agrícola. Estos procesos se deben realizar en condiciones controladas, bien sean plantas de compostaje industrial o sistemas domésticos. Por lo tanto, el compostaje requiere de unas condiciones de proceso forzadas o aceleradas que no se dan en la naturaleza y que, de alguna forma, requieren la intervención del ser humano. En resumen, mientras que los materiales compostables se descomponen en composta en condiciones específicas de compostaje, los materiales reciclables pueden ser procesados y reutilizados para producir nuevos productos, y los materiales biodegradables se descomponen en el medio ambiente con la ayuda de microorganismos. Es importante elegir materiales que se ajusten mejor a tus necesidades y al impacto ambiental deseado, y seguir las pautas de eliminación adecuadas para cada tipo de material.